jueves, 15 de septiembre de 2016

Llano de Bureba (antigua Solas de Bureba). Un amplio paseo a través del tiempo.

San Martín de Tours

La denominación Llano de Bureba es moderna y  no la auténtica. El cambio de nombre surgió como consecuencia de los equívocos que originaba a los carteros su antigua denominación de Solas de Bureba por el de Salas de Bureba.
  El paisaje de sus cultivos variados, combinados con choperas de rivera y salpicados de encinas, nogales, frutales y pequeñas zonas de soto encinal, representan la  dulce campiña burebana.de ricas tierras onduladas en el occidente burebano.
    Tampoco es de extrañar el atractivo que suponían estas condiciones  para el establecimiento y ocupación humana en la antigüedad. Primero en la prehistoria, más tarde el pueblo prerromano de los autrigones donde dejaron su impronta bajo el dominio romano, sin perder sus señas de identidad ya que a pesar de la influencia romana, sus deidades seguían siendo las propias de los celtas en general. La luna, el sol, las estrellas..... Las estelas oikomorfas abundantes en la zona cercana de Poza de la Sal, se ven representadas también  en esta localidad, y son un fiel ejemplo.
   Restos constructivos de la época romana siguen apareciendo con cierta frecuencia en los campos roturados para el cultivo, que gracias al interés de unos pocos, se van recopilando y guardando en la iglesia.
    Con este contexto resultaba ineludible tener que visitarla. El primer toque que recibí vino de allende los mares:Venezuela:
Prehistoria: Hacha pulimentada de Ofita.
Estela oikomorfa burebana
Estela con su forma de casita cercenada. Sirvió de agarre de sogas para el ganado.
Otra que siguió los pasos de la anterior
Materiales constructivos romanos
Molinos de mano
Pesas de telar
Estela medieval
 Es deseo del autor que para ofrecer una buena orientación historica y artística de la iglesia y del pueblo de Llano de Bureba, se mostrara en dicho templo el siguiente texto elaborado por el Prof. Dr. Rodrigo Conde Tudanca. Departamento de Ciencias Sociales, Instituto de Investigaciones Históricas Bolivarium".Universidad Simón Bolívar. Caracas.

IGLESIA PARROQUIAL DE SAN MARTIN
LLANO DE BUREBA

INICIOS DEL PUEBLO ORIGINALMENTE LLAMADO SOLAS, HOY LLANO DE BUREBA
Los orígenes documentales debemos datarlos en el año 1011, cuando el Conde Sancho García y su esposa Doña Urraca donaron al recién fundado monasterio San Salvador de Oña la villa de Solas juntamente con “las colinas, tierras y viñas, prados y pastos, solares, poblados y despoblados...” Y esto mismo que pasó aquí, ocurrió también con multitud de pueblos vecinos y de la provincia, que pasaron a pertenecer al monasterio más importante de la Castilla medieval. 

    Pero si este es el primer dato escrito que tenemos del pueblo, se deduce que el pueblo como tal ya existía. Ahora bien ¿cuándo se fundo? Es difícil precisarlo, pero sí debemos decir que por los restos encontrados en diferentes términos del pueblo, ya existían en tiempo de los romanos villas agrícolas que prosperaron y que fueron la base para que se asentasen grupos de foramontanos que a principios del siglo IX fueron descendiendo de las montañas y repoblando las llanuras castellanas que la sequía y las luchas contra los moros las habían convertido en un desierto. Este fenómeno repoblador fue impulsado por gentes humildes arrinconadas en los valles de la vieja Cantabria a quienes las autoridades les dieron todo tipo de facilidades para asentarse en esos territorios yermos y convertirse en pequeños propietarios libres. Esta repoblación comenzó hacia el año 800 abarcando las márgenes del Ebro y extendiéndose poco a poco hacia el sur. Su supervivencia dependía de la existencia de la nobleza o de iglesias y monasterios importantes, así como de la necesidad de defender los intereses de los monarcas en los territorios de frontera. Todo esto se traduce en privilegios, libertades, exención de tributos para favorecer la expansión. Los condes levantan sus castillos para defender a quienes trabajan en el llano y los monjes hacen su repoblación monástica. 
    Esta gente dinámica e innovadora es la que se asentó en diferentes parajes de la Bureba y que en las tempranas fechas de 1011 aparece firmando un documento por el que se ligan al monasterio de Oña mediante donación que el conde Don Sancho “el de los buenos fueros” hace de diferentes pueblos a favor de su hija Trigidia, primera abadesa de Oña. Este monasterio fue fundado en el mes de febrero de ese mismo año, y en mayo, a las poblaciones que ya tenían, los condes le añaden la propiedad de Solas. 
Más tarde, y en otros documentos del monasterio aparecerán con frecuencia los nombres de Solas, Movilla, Moscadero y diferentes términos de la jurisdicción del pueblo, sobre todo con motivo de donación de tierras o de pleitos entre los vecinos y el monasterio de Oña. 

LA VILLA DE SOLAS
La exención de la jurisdicción del monasterio de Oña y el título de villa le fue concedido a Solas por el rey Felipe V, en 1739. Esta exención, que también se dio a otros pueblos cercanos, les daba la capacidad de nombrar a sus alcaldes, síndicos y demás oficiales, de regirse por sí mismos y de vivir con total autonomía sin depender de autoridades foráneas.

CAMBIO DEL NOMBRE DE SOLAS POR LLANO
Con este nombre se denominó nuestro pueblo hasta el 15 de mayo de 1948, en que se cambió por el actual, para evitar errores y equivocaciones con el vecino pueblo de Salas de Bureba, y tras largos y tediosos expedientes e informes. 

LA IGLESIA
Dedicada a San Martín de Tours (316-397), uno de los santos más populares del cristianismo durante la Edad Media y patrono de numerosas poblaciones e iglesias.

   Construida sobre una pequeña elevación del terreno, al final de la calle Mayor. Está rodeada de una tapia de piedra de sillería, que delimita el recinto en el que en otro tiempo se realizaron los enterramientos, después de que originariamente fuera prohibido hacerlos dentro del templo parroquial por cuestiones sanitarias. Así lo estableció en 1787 Carlos III en todos sus reinos: sin embargo su implementación fue lenta por lo que el primer enterramiento fuera del templo se hizo en 1834.

   Frente a la portada principal hay un monolito rectangular, de una piedra dura de color ocre claro, y cuyos orígenes pueden ser prerromanos. Tiene una altura de poco más de un metro, por 40 cm de cada lado. Hay otro monolito igual en una colina del término municipal donde estuvo la ermita de San Juan. Es incierto su significado, que se presta a diversas interpretaciones.

    La iglesia en un principio era más pequeña. Se conservan trazas románicas de lo que era el primitivo templo que se pueden observar en la sencilla portada sin adornos y en algunos canes en la parte posterior, en la fachada norte, próxima a la subida al campanario. Posiblemente ésta era la longitud de la primitiva iglesia. Ahí se observa la primitiva altura de la misma, sobre la que se amplió la iglesia entre los siglos XV al XVI que tomará la forma de cruz latina.

   La construcción es robusta y firme de piedra de sillería arenisca. Planta de cruz latina con una torre de 16 metros de altura, con cuatro ventanales de arco medio punto y un reloj. En los 2 brazos de la cruz latina hay sendas capillas con sus retablos. Tiene sacristía, coro, un pequeño baptisterio con una pila bautismal cuadrada de arenisca y un pórtico, añadido posteriormente a la entrada principal para protegerla.

   La primitiva iglesia fue reformada y ampliada entre los siglos XV al XVI, sin que tengamos la fecha exacta de la misma. Sus bóvedas y estructura es una transición del gótico al renacentista, sin mayores méritos. La iglesia fue ampliada posiblemente porque resultaba pequeña o por su deterioro.

   El piso es de madera, pero sobrepuesto al pavimento original de piedra, el cual se hizo a finales del siglo XIX para evitar el frío y la humedad. Para sufragar los gastos se vendió una cruz parroquial de plata.
La sacristía está situada en la parte izquierda y tiene una pequeña y bella portada de arco de medio punto. Guarda una antigua mesa y una cajonera, ambas de nogal.

   Las bóvedas son de piedra, con robustos nervios que arrancan de gruesas columnas reforzadas por contrafuertes externos y que se entrecruzan en lo alto formando rosetones decorados con motivos geométricos, cruces o flores. 

EL RETABLO. 
   Se construyó en 1607. Es de estilo renacentista dividido en tres cuerpos horizontales y cinco paneles verticales separados por cuatro esbeltas columnas rematadas por capiteles corintios. La imagen de San Martín en medio relieve ocupa el centro, con la escena tan característica de partir su capa con un mendigo. Alrededor de esta figura central están diversas tablas en bajo relieve con escenas bíblicas de la Pasión, Muerte y Resurrección de Cristo. Encima de la imagen central está la figura del Salvador triunfante en su Resurrección. Rematan la parte alta, sobre el retablo propiamente dicho, las tallas policromadas de las figuras del Calvario: Cristo crucificado en el centro, la Virgen María, San Juan y las Santas Mujeres. Estas figuras son las únicas que se salvaron de la venta clandestina, que en la década de los 50 hizo el párroco, de los 12 apóstoles y los 4 evangelistas que estaban en las hornacinas del retablo que aparecen vacías, y cuyas figuras pintadas están al lado de cada una de ellas. 

    La tabla superior izquierda representa la escena de la oración de Jesús en el huerto. Debajo está la bajada de la cruz, y más abajo la escena de la flagelación. En la tabla superior derecha vemos a Jesús con la cruz camino del calvario, más abajo aparece la escena de la sepultura y en la tabla inferior derecha la entrada triunfante de Jesús en Jerusalén. En la base de este retablo, en el centro está el tabernáculo y a los lados, en sendos altares está a la izquierda la figura de la Virgen María y a la derecha la de San Roque. 

   En la capilla de la derecha tenemos un altar barroco de escaso valor, dedicado a San Blas, santo también muy popular en toda la cristiandad. 

     En la capilla del lado izquierdo hay dos retablos. Uno sirve de hornacina a un bello e interesante calvario gótico con las imágenes del Crucificado, la Virgen y San Juan. Esta hornacina no tiene ningún valor y es del primer tercio del siglo XX. El otro retablo es de estilo renacentista y está dedicado a Santa Ana y ofrece diversas escenas de la vida de Jesús y de María.

   En 1799 se construyeron las escaleras del coro, se abrieron dos ventanales para dar claridad a la iglesia, así como el óculo en el coro. También se pusieron las vidrieras en las ventanas y se colocó en su sitio la pequeña imagen de San Roque del altar mayor. Así consta en el libro 4 de Fábrica, folio 70.

CAMPANARIO
Se accede por una escalera desde el exterior. Tiene 4 campanas, dos grandes y dos esquilones. Tenemos constancia de que en 1690 se fundió un esquilón añadiéndole más metal que procedía de otro que hubo en la iglesia de Moscadero y que pesaba dos arrrobas y media.

EL MORAL 
Se plantó en 1845, en los terrenos de lo que por entonces era el cementerio, cercado por una tapia de piedra tal como está en la actualidad. Se tomó ocho años antes de una rama de otro moral “el viejo o grande” que existía enfrente de la portada de la iglesia. Así lo anotó el párroco de entonces, don Ángel Díaz, al comienzo del libro quinto de bautizados de la parroquia (1838-1853) con los siguientes datos: “En diez de marzo año de mil ochocientos cuarenta y cinco, se plantó el moral en el rincón del Cementerio en subiendo las escaleras de él a la derecha, producente de una ramita del viejo o grande que existe en dicho Cementerio enfrente de la puerta de la iglesia, plantada la ramita por Julián Zaldíbar maestro de primeras letras y vecino de ésta, y a los ocho años se sacó de la huerta y lo plantaron en dicho punto Manuel Martínez, Miguel Rebollo García, Julián Zaldíbar y D. Ángel Díaz.”.

   Es común en algunos pueblos plantar un moral a la entrada de las iglesias. Este árbol pertenece a la familia de las moráceas, denominado también morera negra o moral negro (morus nigra) y a pesar de tener casi 180 años se mantiene lozano y frondoso y es el símbolo natural del pueblo. Está identificado en varios portales de la web como ejemplar protegido dentro de diversos proyectos de catalogación, conservación y divulgación de los árboles más singulares del territorio español.

¿QUÉ MÁS VISITAR?

    Te invitamos a pasear por el pequeño pueblo, recorrer sus calles y plazas, compartir con los vecinos en el bar y llegar hasta el término de “Las Bodegas” a escasos 500 metros de distancia donde excavadas en la ladera se encuentran unas 40 bodegas de orígenes medievales, alrededor de las cuales había muchas viñas de las que se producía un sabroso vino “chacolí” del cual todavía puedes degustar un buen vaso. ¡Bienvenidos a Llano!

Fuente: Rodrigo Conde Tudanca (marzo 2016)
Iglesia de San Martín de Tours

Morera "documentada"

Pila ochavada por fuera y cuadrada en su interior. Posible románico.


Altar mayor que supuestamente se hizo para el Monasterio de Oña pero por alguna razón que desconocemos,  acabó aquí. Se aprecia el difícil  e irregular anclaje forzado con respecto al fondo de la iglesia.

Tenebrario de nogal
Retablo mayor 
Altar

San Roque
Fechado


El retablo es moderno, las figuras son de transición entre románicas y góticas.

Retablo de gran interés artístico
Una de las secuencias: adoración de los Reyes, de gran calidad

Los donantes benefactores se representan a la derecha e izquierda de Santa Ana
Virgen románica. Talla de madera policromada
Campanario
Vistas desde el campanario

A lo lejos también se divisa el castillo de Rojas.

    VIDEO RECOPILATORIO

2 comentarios:

Rodrigo Conde dijo...

Felicitaciones al blog por el reportaje de Llano. Es una buena manera de dar a conocer nuestros valores autóctonos, nuestra riqueza natural y artística y nuestra idiosincracia. El autor continua con la labor meritoria de poner en la web los pueblos burgaleses y burebanos y permite conocer sus lugares sin moverse de su casa. Es una buena manera de animarse, una vez vistos en el blog, ir "in situ" a conocer todos esos rincones de nuestras comarcas burgalesas.
Un abrazo

ZáLeZ dijo...

Hola Rodrigo:
Gracias a ti por la cantidad de información que me aportaste, y también gracias a tu hermano que fue un guía estupendo.

Un abrazo desde España a Venezuela.